"Azul" – Escultura Cinética e Iluminada Inspirada en la Ballena Jorobada

Artista: Estéfano D. Pérez

Fecha de Creación: 2023-2024

Dimensiones: Escultura 330 cm largo | Estructura soporte 500 cm largo x 230/280 cm alto

Materiales: Madera de plátano, pino douglas para la estructura, luces LED, mecanismos de movimiento (cadenas, engranajes, motor eléctrico...)

Una oda luminosa a los guardianes del océano

"Azul" es una escultura cinética e iluminada que rinde homenaje a la ballena jorobada, un símbolo de la majestuosidad marina y la interconexión entre el ser humano y el océano. Creada por el artista Estéfano D. Pérez, esta pieza combina arte, movimiento y luz para ofrecer una experiencia inmersiva y evocadora, capturando la elegancia y la fluidez de estos gigantes del mar en su hábitat natural.

Movimiento, luz y conexión con el mar

Con una estructura articulada y un diseño que evoca la fluidez del movimiento de las ballenas, Azul captura la elegancia y majestuosidad de estos gigantes del océano. Cada detalle de la escultura ha sido cuidadosamente concebido para transmitir la armonía y resiliencia que caracterizan su danza en el mar.

Más allá de su impacto visual, la obra invita a la reflexión sobre la conservación marina y nuestra relación con los ecosistemas oceánicos. Su iluminación interior no solo resalta su presencia en el espacio, sino que también simboliza la conexión entre la vida y la energía que fluye a través de la naturaleza, recordándonos la importancia de proteger el planeta.

Un viaje de introspección y compromiso

La contemplación de Azul nos transporta a un espacio de introspección, donde las fronteras entre el ser humano y la naturaleza comienzan a desdibujarse. A través de su arte, Estéfano D. Pérez construye puentes de empatía y entendimiento hacia esas otras formas de vida con las que compartimos el mundo.

Un llamado a la acción y a la esperanza

En su esencia, Azul es un recordatorio de nuestra responsabilidad con el entorno. Nos inspira a reflexionar sobre la fragilidad de los océanos y la necesidad de proteger su biodiversidad. Al igual que las ballenas jorobadas navegan por los mares con paciencia y determinación, también nosotros podemos afrontar desafíos y trabajar juntos para preservar el azul que nos rodea.

En la presencia imponente de esta escultura, se nos ofrece una oportunidad para reafirmar nuestro compromiso con el planeta, imaginando un futuro donde humanidad y naturaleza puedan prosperar en armonía.